Hiya people!
Ya hace dos semanas que llegué a Escocia y aun sigo acostumbrándome a la familia, las costumbres y al idioma. Del clima aún no me quejo nada porque nos ha hecho un tiempo estupendo. Entre unas cosas y otras no he podido poner al día el blog y tengo una lista que va "in crescendo" de entradas pendientes de cositas que quiero contaros =)
Dos semanas antes del viaje pasé unos cuantos días en mi pueblo para despedirme de mi familia y de mis amigos. Obviamente hubo una noche de copas para darlo todo y hacer la despedida por todo lo alto, regalitos, etc... Tenía todos los nervios en el estómago y no disfruté como me gustaría haber disfrutado, no podía dejar de pensar que al fin y al cabo eso era una despedida. Simplemente estaba muy triste y suelo ser una persona bastante fuerte, por eso me sorprendí de mi misma jeje
La semana antes del viaje fue un poco atropellada para mi porque tenía que dejar mi piso de Madrid y hacer toda la mudanza para dejar l
as cosas en mi pueblo, contratar a una empresa para que me ayudase, tenía que despedirme de mucha gente y quería pasar el mayor tiempo posible con mi novio, el cuál estaba justo en su semana de prácticas y la mayor parte del día la pasaba fuera -¿Por qué has tenido que elegir esta semana para irte? Me decía. La despedida fue a las 6 de la mañana, él me decía adiós con la mano mientras yo lo veía más y más pequeño mientras me alejaba en un taxi que me llevaba al aeropuerto.
Suelo viajar con bastante frecuencia por lo que ir al aeropuerto más sola que la una no fue ninguna novedad, es más prefería eso a que viniesen a despedirme y estar llorando como una magdalena.
Durante todo el viaje lo único que me preguntada era ¿Por qué? ¿Por qué me había metido en ese embolado....con gente a la que no conocía......? En ese momento hay que ser fuerte y tirar para adelante ya que tenemos que pensar que es una experiencia que nos va a enriquecer de una forma o de otra (idioma, crecimiento personal, amigos, cultura...). Ser au pair no es para siempre, si la experiencia es horrible siempre podemos dar un paso atrás y buscar otra familia o volver a casa con los nuestros. Pero yo soy de la opinión de que hay que intentarlo ;)
Ya sentada en el avión pensé "De perdidos al río y pa´lante con esto". Estaba súper contenta porque yo llevo queriendo vivir esta experiencia desde hace mucho pero a la vez estaba aterrorizada porque en realidad iba a casa de gente que no conocía.....¿Y si cuando llegue al aeropuerto la familia no aparece?
Otra de las dudas absurdas que se me pasaron por la cabeza durante muuuuucho tiempo y que quería hacer mención aquí fue ¿Cómo voy a saludar a la familia? ¿Un abrazo? Demasiado atrevido ¿Dos besos? Demasiado español ¿Les doy la mano? Demasiado frío......incluso le pregunté a otras au pairs que cómo habían saludado a sus familias.
Cuando llegué a Edimburgo y salí por la puerta de "arrivals" estaban esperándome la madre y los dos niños. La madre y la niña directamente me dieron dos besos (Se ve que estaban acostumbradas al haber tenido otras au pairs españolas jaja) y al niño pequeño le di un abrazo y le solté un besazo jajajaja. Gracias a Dios no me vi en ninguna de estas... #CobraStyle
Todo el viaje hasta la casa fuimos hablando y contemplando todo el paisaje verde MUY VERDE típico escocés.
La madre me comentó que esa semana los niños aún tenían Easter Holidays (Pascua en castellano) y que me la tomara con calma y como toma de contacto.
Desde el momento en qué llegué yo tenía muy claro mi papel aunque ellos no me dijesen nada ayudaba con la limpieza, me interesaba en como funcionaban las cosas, tenía iniciativa, hacía mil preguntas, jugaba mucho con los niños. No somos una invitada, debemos tener nuestro papel muy claro e ir demostrando por nosotras mismas que tenemos interés en las cosas a la vez que nos vamos involucrando desde el principio.
Nada más llegar me enseñaron mi habitación y mi baño que están en la parte de arriba de la casa, yo solita jiji ya que todos ellos duermen en la planta baja. Encima de la cama tenía una cesta de bienvenida con: pasta y cepillo de dientes, champú, gel, acondicionador, una esponja, unos calcetines de felpa monísimos (Una indirecta para que me los ponga para andar por la casa jaja), una bata súper suave y unas chocolatinas =))))))))
Cuando les di los regalos a los niños se les iluminó la cara Thank you, thank you, thank you, daba gusto verlos disfrutar y divertirse con las cositas que les traje.
Por la tarde fui a conocer a otra chica italiana que llevaba ya 2 semanas en ese pueblo siendo au pair para que me enseñase un poquito el lugar e ir a comprar cosas para el baño que me había dejado en casa.
La primera impresión fue buenísima, eran todo lo que me parecieron por Skype, sin ninguna sorpresa extraña y gente súper abierta dispuesta a ayudar.
Ahí es cuando me relajé y pensé que ese iba a ser el comienzo de una preciosa experiencia =)
